DÍA 30 DE OCTUBRE
Contigo de nuevo, mi árbol
Me haces ver que te llega el otoño también
Estos pálidos y tiernos días del otoño que nos regalan
Nuevas conversaciones
Con sabor a canela
Con olor a nostalgia
Con tristeza, sí. Por qué no decirlo. Esa tristeza dulce que la nostalgia hace que aparezca así, así nomás, recordando que somos por lo que fuimos, pero que lo seguimos siendo, que seguimos estando.
Tristezas del ayer, hoy convertidas en dulzura, en amor. Pero sí, son así.
Esas que el alma cubre con su manto de amor
Esas que el alma abraza porque nos recuerdan que somos lo que somos por lo vivido
Pero grande grande tiene que ser el AMOR, INMENSO! PODEROSO!
Así tiene que ser el amor para que predomine lo bueno, para que se pueda convertir un dolor en un renacer
Y también sentirse vulnerable, digno del abrazo que faltó
-Aquí están mis brazos-
Recordándome esta tarde de Octubre
Esta tarde de otoño,
Querido árbol, que ahora te toca estar así, mudar esas hojas que fueron verdes y hermosas y que ahora truenan rico, como a mamá le gustaba, al pisarlas. Mamá... Siempre conmigo.
Querido árbol, no has perdido nada, es solo lo que te toca en este momento. Tú también lo sabes, sé que lo sabes. Y que sigues aquí, erguido, viviendo tu momento, sintiendo el amor de Dios, sabiendo que me acompañas y que se apagó un instante la respiración pero que volvió, y que aquí estamos, aún respirando
Nunca te olvides de Dios

Hola, Maty, como esos árboles que pierden las hojas en el otoño, así debemos ser los humanos y tenemos que tenerlos a ellos como ejemplos. Ante la adversidad, mantienen la paciencia en invierno, crecen en su interior y en primavera resurgen, rebrotan con más fuerzas si cabe. Así debe ser y así debemos tomar ejemplo. Y nuestros seres queridos siempre en nuestros corazones.
ResponderBorrarUn fuerte abrazo, Maty. :)
Mi querida Merche, muchas muchas gracias y millones de abrazos 🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹🌹
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