RESPIRACIÓN
Y la vida corre, y en su correr presenta diferentes situaciones que en un momento dado, o en muchos, te provocan a colapsar. Y te dicen
"Relájate, respira profundo profundo, bien hondo"
Es algo que se da por hecho.
La respiración también se cansa de que no la tomen en cuenta. Está allí siempre de manera total, de manera básica e inagotable.
¿Inagotable?
Una respiración profunda es totalmente relajante, te eleva...
La respiración dijo un día:
¡Cuánto mundo contaminado!
Cuánta impureza hay en el aire
"El aire que respiramos"... dicen todos, o decimos todos.
Los glaciares se están acabando
El mundo recibiendo palos hasta que no pueda más, y muchos no lo quieren ver. Lo dan por sentado, siempre está allí y así es y así será por los siglos de los siglos. ¡Nunca acabará! ¿Que el "fin del mundo?" ¡Bah, palabras, llevan años diciendo eso! Y damos todo por hecho, pensando que así está bien, que imposible que haya un cambio para mal. ¡Tanto nos hemos acostumbrado! que no vemos, por más señales que estén enfrente, aunque sean aullidos los que tengamos en el tímpano, no escuchamos.
Un día caminas y respiras y respiras y... No es igual. Algo raro hay, algo que desentona con "lo de siempre". Un día se diluye la fuerza y la contrarrestas con lo que se pueda. Ahí está el árbol, hojas grandes, verdes y ese verdor el Sol lo agiganta. Pero hay un humo tan espeso que tiene envidia de esa frescura y quiere llegar como un ladrón a apoderarse de la felicidad, del goce que produce lo imponente de ese verdor, la fuerza de ese inmenso tronco aferrado al suelo con sus grandísimas y poderosas raíces que le dan un talante y una galanura sin igual. Y hay cemento cubriéndolas, pero hasta ese concreto tiene un límite y la fuerza de la naturaleza lo rompe, lo aniquila para salir a decir AQUÍ ESTOY, SOY RAÍZ FIRME Y PODEROSA, MI ESENCIA ES MI FUERZA INCALCULABLE, PRESENTE Y ESCANDALOSA A MÁS NO PODER.
Y no dejas de caminar, pero te tienes que detener. La respiración, tan natural, tan "de cajón", te dice que ¡hay un concreto que pesa tanto! Y debes hacer una pausa. ¿Qué haces con ella? ¿Te das cuenta de lo que está sucediendo?
Nace, muere. Inevitablemente. Muere, nace. Y vuelve a morir. Y en ese espacio, tú decides si lo meditas o lo dejas en piloto automático. ¡PELIGRO! Sí, es peligroso darlo por hecho todo, hasta la respiración, como si nunca se fuese a quejar, como si fuese eterna, como si nada la pudiera detener. Y así pasamos, transcurrimos con nuestros cuerpos que al cabo son frágiles y superdotados a una serie de factores que impone la Madre Naturaleza, la vida sencillamente. Somos vulnerables, pero no lo queremos pensar. Nos quebramos, pero así vamos hasta que...
¿Y qué fue? ¿La vida? Los acontecimientos, uno tras otro que a galope o trote lento o pausado dejaron su huella. ¿Quizá eso? O que todo un día tiene que terminar.
En ese "inter", la raíz seguirá rompiendo el concreto para decir SIGO, SIGO Y SOY FUERTE. ¿Se destruirá sola? ¿Qué pasará con ella? ¿Qué pasará cuando no tenga aire para respirar y seguir con ese ímpetu? ¿Qué acaba con ese oxígeno que debe tener la raíz para seguir con semejante fuerza?
Semejantes a esa raíz, o queriendo hacer que todo sea en ese sentido inquebrantable, LO SABÍA, sí. Puedo decir que siempre lo pensé, que nunca se me escapó el detalle de una finitud, el detalle "pequeño" de que todo tiene una evolución y así lo es mi propio organismo, mi propio cuerpo que un día me dijo todo esto y mucho más, cuando ya no pude respirar como de costumbre. Y doy las gracias de la manera más sincera, rotunda y tierna de que soy capaz por todo lo que sí pude hacer y ahora me enfrento a esto con la mayor alegría posible, yendo hacia donde la VIDA dirija, sin más que viviéndolo así, como corresponde. Agradeciendo al cuerpo toda su entrega para que mi vida espiritual haga un conjunto con lo físico de tal forma que no deje de admirarme de todo lo que sí pude, de lo que aún puedo en estas condiciones. Aunque a veces se derrame una lágrima, o dos...
Es la obra humana, o es el devenir natural de un final que no se puede detener porque es ley de vida. Y aún así, no se acaba hasta que se acaba.
Hola, Maty, vaya reflexión te has marcado de un hecho tan normalizado como es la respiración. Fantástico. Y, como dices, la respiración un día se va a cansar de que no le hagamos caso, pero es que..., ¿qué respiramos? Si ya el mundo es basura, ¿eso respiramos? Una muy buena reflexión, Maty. Y la foto, más significativa imposible.
ResponderBorrarUn abrazo. :)
¡Hola Merche! Es que sí que lo damos todo por hecho, hasta que algo nos pone a pensar... A veces. Abrazos!
BorrarReflexión muy necesaria, muchísimas felicidades amiga Matty, te mando un abrazo desde España :-)
ResponderBorrarMuchas gracias Oscar, un abrazo también para ti 🤗🤗
BorrarHola Maty, has escrito una gran reflexión, muy necesario pararase a pensar a veces en estos detalles.
ResponderBorrarLa respiración algo tan necesario, en un mundo cada vez más sucio, en muchos sentidos, no sólo en el literal.
Un abrazo grande 🤗
Pensarlo, ayuda mucho Mari. Muchas gracias, te dejo un fuerte abrazo.
Borrar¡Vaya reflexión que escribiste!, tan cierta que nadie la ve, pues al aire ese alimento celestial que el prioritario en la vida es invisible, y aunque se le mira cuando está contaminado la mayor parte prefieren obviarlo. Cuando falta ahí si, nos recuerda que tan vital es, como el agua, dos de los grandes, en nuestras vidas, que ensuciamos y contaminamos, y los desperdiciamos. Muy buena Maty, todo esto que dices, abrazo super grande, Themis
ResponderBorrarEs así tal cual lo dices Themis. Muchos abrazos!
BorrarLa máquina se cansa, a veces por exceso de kilometraje y otras veces porque hemos abusado de ella. Sea como sea, no queda de otra mas que continuar, sacando partido de cada momento, exprimiendo cada gotita de vida y tratando de ser felices. Te mando un abrazo fuerte, muy fuerte. Ana Piera.
ResponderBorrarCaptaste Ana, y te agradezco mucho el abrazo y lo recibo con harto cariño, así de fuerte. Muchas gracias! 😊
BorrarBuenas Maty!
ResponderBorrarQue forma tan serena de describir lo inevitable, con lo difícil que es decirlo así de sencillo cuando uno se enfrenta al desgaste.
Pero tu lo has dicho, no se acaba hasta que se acaba, y mientras tanto, hay que aprender a concentrar las fuerzas y encontrar aquello, por pequeño que sea, que nos empuje a seguir.
A veces basta un momento bien vivido para que todo tenga sentido.
Un abrazo Maty, y un soplo de aire fresco
Finil, me has dicho unas palabras más que hermosas, como dices AIRE FRESCO y mucho calor humano. Y palabras llenas de verdad. Te mando otro abrazo muy sincero. 🌹🌹🌹🌹🌹
Borrar¡Hola, Maty!
ResponderBorrarQué manera tan tuya de escribir, con esa honestidad serena que desarma. No he podido evitar detenerme en cada línea, porque sé todo lo que hay detrás de tus palabras: la vida, la lucha, la aceptación, y esa gratitud que siempre consigues poner por delante, a pesar de todo.
Me ha llegado muy hondo esa imagen de la raíz rompiendo el concreto, insistiendo en su espacio, en su vida, como tú. Es imposible no verte reflejada ahí, con esa fuerza silenciosa pero firme con la que sigues dejando una huella indeleble que compartes con los demás y en la que también me siento agradecido por viajar contigo, junto a ti.
Gracias por compartir algo tan sincero, tan tuyo, y por recordarnos con cada texto que a veces solo basta respirar, pero respirar de verdad, conscientes de todo lo que eso significa.
Una maravillosa reflexión de vida, amiga mía. Y reconozco que con esta frase "AQUÍ ESTOY, SOY RAÍZ FIRME Y PODEROSA, MI ESENCIA ES MI FUERZA INCALCULABLE, PRESENTE Y ESCANDALOSA A MÁS NO PODER." me he emocionado muchísimo...Y con tu reflexión también me has hecho derramar una lágrima, lo reconozco, tal cual. Pero no de tristeza, de pura emoción contenida, esa que a veces tiene que desbordar por algún lado, ¿no? Y ya está, no sigo, que me desarmas...
¡Un fuerte, pero que muy fuerte abrazo, pero dejando respirar eh! 🤗❤️
¡Miguel! ¡Cómo sobrevivo a todo lo que me dices! Yo también estoy orgullosa y agradecida de poder caminar contigo este cachito de vida que nos ha tocado. Créeme que no hay maestro que se te pueda asemejar. Así de fuerte te abrazo también, y respirando.... Seguro! Y besito en la frente 🤗🤗🤗
BorrarExcelente reflexión, Maty. Como todo lo que damos por hecho y es lo más importante, como en este caso la respiración que nos da Vida. E incluso cuando dicha respiración se nos vaya agotando estemos en paz o felices con lo que vivimos y nos tocó vivir. Porque todos somos finitos.
ResponderBorrarUn abrazo gigante 🤗
Muchas gracias Yolanda 😊. Sí, en lo que dices está la clave para una reconfortante PAZ: aceptación. Un gran abrazo! 😘
BorrarEs increíble. Respiras sin darte cuenta. Muy buena reflexión. Un abrazo.
ResponderBorrar